ENTREVISTA del Programa ENCUENTRO

Uncategorized

https://soundcloud.com/giovanniromero/1064enc-mi-hijo-se-marcho-encuentro-dirigido-por-giovanni-romero
https://l.facebook.com/l/TAQHzsEt9AQGuzC0SsWHtiVbSbAhK9gT3nL3ALIqheaedLw/https%3A%2F%2Fsoundcloud.com%2Fgiovanniromero%2F1064enc-mi-hijo-se-marcho-encuentro-dirigido-por-giovanni-romero

12.12.12

Sin categoría

Se acerca un dia mas…
pero tambien un dia especial
por sus caracterisitcas numericas…

En virtud de eso,
se celebran en esta oportundiad diferentes actividades.

ADORA AMERICA

Adora América es una iniciativa de pastores y laicos que, impulsados por el Espíritu Santo, convocan a la iglesia a orar y adorar simultáneamente el 12-12-12. Miles de congregaciones se conectarán en una histórica transmisión simultánea para catalizar la sed de transformación de individuos y pueblos

ONE WORLD

Movilizacion Muindial Juvenil por los Valores Cristianos.
y Trabajo Social a favor de jovenes en Situacion de Riesgo.

OREMOS y ACOMPAÑEMOS AMBOS MOVIMIENTOS  de alcance mundial.

Encuentro Jovenes 15 a 18 años

Sin categoría

PROYECTO DE VIDA: ¡VAMOS por MÁS!!!

 COLON – ENTRE RIOS 4 y 5 de NOVIEMBRE de 2.011

 

 

Nos encontrarnos, compartimos, aprendimos, transmitimos experiencias, sensaciones, emociones, inquietudes… en el PROYECTO DE VIDA que se comienza a diseñar en cada uno de nosotros, los jóvenes que estuvimos presentes en el 1º Encuentro de Jovenes en COLON – Entre Ríos.

 

img_2105

img_2106dscn5422

 

dscn5455

¡Qué GRAN desafío!!! ¡Cuántas inquietudes surgieron a partir de lo vivido!!!

La consigna de los jovenes participantes a partir de ahora es: ¡VAMOS POR MAS!!!

ENCUENTRO para JOVENES 15a18

Sin categoría

Te invitamos a un ENCUENTRO de JOVENES de 15 a 18 años.

COLON – ENTRE RIOS             4 y 5  de NOVIEMBRE de 2.011

Pensado tu PROYECTO de VIDA: ¡VAMOS POR MAS!!!

Hace click en el sig link para ver el afiche:

promo-proyecto-de-vida-2011-11-4-5

Ponete en contacto con nosotros para confirmar tu asistencia.

PADRES MODERNOS

Sin categoría

 

Advierten sobre el riesgo de la falta de límites. Tienen entre 30 y 40 años y fueron criados con rigor y distancia emocional, pero con sus hijos no replican ese modelo, sino que son compinches y comprensivos. Los peligros de hacerse “el amigo”.

El destino son los padres”, decía Freud. En este caso, el gran estudioso del inconsciente parece que se quedó corto. Lo que el médico de Viena trataba de explicar era que no hay manera de escapar de un destino fileteado de antemano. Que allí donde vayamos, como una sombra implacable, viajará nuestra historia emocional y nuestra infancia, la patria de cada uno.

Pero algunas cosas cambiaron. Entre ellas, el rol del padre, una tradición –del tamaño y la dureza de un trasatlántico cultural– que parecía condenar a los varones a la insularidad emocional. Como asegura el especialista Rafael Montesino en su obra Las rutas de la masculinidad, las relaciones entre varones tenían “que demostrar los atributos masculinos: una rudeza manifiesta desde el lenguaje hasta la gesticulación, situación que antes dificultaba las expresiones afectivas entre padres e hijos, obligando sobre todo a los varones a reprimir sus sentimientos”.

A diferencia de lo que supo ser una conducta inalterable, los hombres de hoy se relacionan diferente con sus hijos. Lo que históricamente fue un vínculo dominado por la distancia afectiva, los silencios y hasta cierta hostilidad llevada con orgullo –algo que se exacerbaba con el hijo varón– hoy se posiciona en otro lugar. Son padres de entre 30 y 40 años que crecieron en una sociedad asfixiante –niñez y primera adolescencia durante la dictadura–, lo que generó, acaso como respuesta a esa opresión, que la libertad fuera incorporada con cierta desmesura. Ya en el rol de padres, y con el recuerdo ingrato de haber padecido esa severidad, los hombres se acercan a sus hijos permitiéndose el cariño. Son parte de una generación que, más tarde, abrazó masivamente el rock y tuvo una relación mucho más natural con el placer, lo que le permitió cambiar los parámetros de conducta: de padres severos y con su afectividad mutilada, a padres compinches y capaces de poner el cuerpo. “Antes había cosas que se hacían a escondidas (probar el alcohol, prender un faso) y ahora buscás que las haga con vos para poder guiarlo o explicarle”, dice Rafael Buelink, padre de dos hijos (ver “Lo que marca…”). “La generación anterior, los padres de los actuales padres o los abuelos de hoy, han tenido cierto autoritarismo como característica de su carácter”, aporta Mónica Peisajovich, Psicologa.

La licenciada Liliana Racig desentraña las razones que contribuyeron a que el control se volviera permeable. “Los excesos o abusos de autoridad generaron mala prensa sobre ese vínculo, y temor frente a su uso, tanto en lo familiar como en lo social. Especialmente en sociedades como la nuestra, víctima del autoritarismo durante largos períodos”.

Esa mala prensa del concepto de autoridad provocó también que, al tiempo que los padres se amigaban con sus hijos, calzaban su misma marca de jean y zapatillas e iban con ellos a recitales –aun cuando los chicos tienen edad de jardín–, se desdibujaba el concepto de límites, conllevando un peligro para el futuro.

Racig cree que hay que revalorizar ese concepto. “Porque es importante el límite que protege, no el que anula. Es un límite que brinda el marco adecuado para no exponer a los niños a lo que, por su madurez, no pueden manejar”.

Ahora bien, ¿hay ventajas concretas de ese acercamiento? De acuerdo a los especialistas, el hecho de crecer en un clima de mayor afecto y contención hace que los chicos desarrollen la creatividad, la libertad y la capacidad de crítica. Claro que ese avance debe ser cotejado, casi obsesivamente, para que los chicos no se sientan los reyes de la casa.

“Lo que hay que hacer es darle solvencia al rol de padre, basado en nuestra responsabilidad frente a su bienestar, asumiendo con seguridad el desafio de la ira cuando decimos ‘no’ porque lo hacemos desde el amor. Eso sirve, fundamentalmente, para que enfrenten y conozcan la frustración y generen anticuerpos reales”, concluye la licenciada Racig.

En definitiva, el avance del rol del hombre en el hogar y la crianza es un avance en primer lugar para él: el hombre es capaz de mostrar lo que siente sin que ello signifique, como ocurría antaño, un rasgo de vulnerabilidad. Ese salto de calidad emocional, esa pequeña “revolución de la ternura” conlleva excesos, riesgos, otras ausencias –tal vez no físicas, pero sí de límites– que cada casa y cada alcoba intentará equilibrar con su propia lección de anatomía.

 

El lado oscuro del “populismo paterno”

 

En el juego del cambio de roles –o de su oscilación– hay distintas posturas. Para el ensayista y escritor Juan José Becerra, la paternidad “es una experiencia de amor clásica y ‘conservacionista’ en la que está todo inventado. La complicidad sin reservas con ellos es una calamidad”.

Con más de 35 años de experiencia en el tratamiento de conflictos familiares, la licenciada Fanny Feferman considera que “el cumplimiento de la norma es fundamental. El premio por un buen desempeño no debe ser a través del regalo de un objeto (lo más usual), sino de un reconocimiento explícito al hijo, de manera que se sienta orgulloso de cada logro, a la vez que querido y respetado”.

“Dulzura y a la vez firmeza –agrega la especialista– son fundamentales. Y, además, ser permanemtemente ejemplo entre lo que se dice y se hace”.

Becerra ve un estereotipo en el varón que es amigo del hijo: “Terminemos con el padre que busca siempre la relación horizontal con sus hijos por el sólo hecho de sentirse falsamente actualizado o rejuvenecido. Un padre es una imagen, y si uno le va a dar a sus hijos la misma imagen que les puede dar un amigo banana, la paternidad desaparece”.

Para terminar, el ensayista pone el ojo en los límites, ese concepto tan escurridizo. “Me gustan los padres que basan su autoridad en el argumento y asumen su debilidad cuando los hijos argumentan mejor. El populismo paterno es para padres fiacas porque ahí no argumenta nadie y gana el que se pone más pesado. “


mafalda-padres-01

Tomado de Eirene Argentina (Sitio Oficial),

OCTUBRE

MES DE LA FAMILIA

Sexualidad

Sin categoría

Escuche en CHARLAS ACERCA DE NUESTRA COTIDIANEIDAD

el tema:

SEXO Y SEXUALIDAD en NUESTROS HIJOS.

a cargo del   Prof. Dr. Osvaldo Juan MACCIO

Sábado 18.30 hs. y Domingo 8 hs

FM VOZ de ESPERANZA 99.1 Mhz y

ON LINE: ww.vozdeesperanzaweb.com

———————————————————————————–

A manera de anticipo lea en nuestro sitio web el articulo:

La educación sexual en la familia©

Preparando a nuestros hijos para el matrimonio

Por el Prof. Dr. Osvaldo Juan Maccio

Introducción

La educación sexual de nuestros hijos es una responsabilidad y privilegio que nadie fuera de nuestra propia familia y de la familia de Dios, nos puede arrebatar, y menos aquellos que defienden los pecados sexuales como “la libre elección de ;las personas en determinar su género sexual”.

La sexualidad humana constituye el origen de vínculos más profundos entre los seres humanos, y de su realización efectiva depende el bienestar de las personas, los matrimonios, las familias y la sociedad. La educación sexual por lo tanto debe ser desarrollada en forma plena, congruente y armónica con el resto de las cualidades humanas. Pero una educación sexual no sería completa sino no contuviera los valores espirituales y principios bíblicos para el buen uso de esa sexualidad.

La educación sexual de nuestros hijos no debe ser un capítulo aparte en la educación que reciba a diario; sino que tiene que formar parte, teniendo su justo lugar, en la educación integral que le damos nosotros los padres. Una función importante de los padres es hablarle a los niños acerca del amor, la intimidad y el sexo. Los padres pueden ayudar mucho si crean una atmósfera positiva en la cual se pueda hablar con sus hijos acerca de estos temas. Sin embargo, muchos padres evitan o posponen esta discusión.

La educación sexual cristiana

Los niños y adolescentes de familias cristianas necesitan educación y dirección de sus padres para ayudarlos a tomar decisiones saludables y apropiadas con respecto a su comportamiento sexual, ya que pueden estar confundidos y estimulados en exceso por una mala información proveniente de modas o presiones de la sociedad.

Así como no existe un determinado día, época del año o de la vida para enseñarles el temor o la obediencia a Dios, como así también los valores de la vida como ser el bien, el amor, la justicia, la verdad, la solidaridad, etc. pues son temas de interés y trato constante, de la misma manera la sexualidad y todo lo concerniente a ella, especialmente su uso, se enseñará cuando la oportunidad o la necesidad lo señale o exija.

La Biblia y la sexualidad

Desde la primera página hasta la última de nuestras Biblias, Dios nos habla de sexualidad y sexo. Aunque la palabra sexo, propiamente dicha no se encuentra en ella.

Al principio, en Génesis 1:27 expresa: “Y creó a Dios al hombre a su imagen, a imagen de Dios lo creó; varón y hembra los creó.” En realidad la palabra “varón en este pasaje es sinónimo de “macho” (En hebreo la palabra original es: zacar, término que da la idea de algo que tiene la particularidad de “penetrar u horadar”. Para el caso de la palabra hembra, el término original es: nequevah, el que a su vez expresa la idea de “receptividad, de “ser penetrada” o “tener la posibilidad de ser penetrada.”

Es interesante marcar la diferencia de las palabras utilizadas en el original en este pasaje y en el del cap. 2:23, donde las palabras para varón y varona son: “ish” e “isha” (o “ishah”) respectivamente. En esta porción no se quiere dar la idea de sexo, sino de sexualidad, marcando la diferencia de roles y funciones, o bien como el contexto lo indica de identidad y unidad complementaria.

Y al final, en la última página del Apocalipsis leemos en el cap. 22:14-15, acerca de los fornicarios (una de las conductas pecaminosas relativas al sexo) que quedarán fuera junto con otros.

Además son muchas las escenas bíblicas donde el Espíritu del Señor nos enseña sobre la bendición de la sexualidad y nos muestra, advirtiéndonos, sobre las debilidades sexuales y sus consecuencias de muchos personajes tanto del Antiguo como del Nuevo Testamento.

Conceptos y contenidos

Hay varios términos que se usan en el proceso de enseñanza-aprendizaje, los cuales vamos a aplicar a la enseñanza y aprendizaje de los conceptos, principios y manejo de la sexualidad por parte de nuestros hijos.

Podemos separar la enseñanza en dos etapas, la Primaria y la secundaria.

A – Etapa primaria: Esta etapa es la comprendida desde el nacimiento hasta el inicio de la pubertad. En ella el niño recibirá INFORMACIÓN.

Información es dar conocimiento anatómico y fisiológico. Cómo son y como funcionan cada uno de los órganos genitales.

B – Etapa secundaria: Es la que va desde la pubertad hasta la juventud (y muchas veces más allá…): En ella el adolescente recibirá INSTRUCCIÓN + CAPACITACION = EDUCACIÓN.

Instrucción es dar capacitación para usar el conocimiento adquirido en la etapa de información.

Educación es dar formación para usar bien ese conocimiento y capacitación.

Como resumen podemos señalar que el comienzo y el fin de cada etapa no serán fácilmente identificables, muchas veces se superpondrán y el ritmo del proceso será dado por el niño al hacer sus preguntas y por los padres en la forma y el cómo dan las respuestas.

Al hablar con su niño o adolescente

Es de gran ayuda el que:

· Estimule a su hijo a hablar y a hacer preguntas.

  • Mantenga una atmósfera calmada y libre de críticas para sus discusiones.
  • Use palabras que se entiendan y hagan que el niño se sienta cómodo.
  • Trate de determinar cuál es el nivel de conocimiento y entendimiento del niño.
  • Mantenga su sentido de humor y respeto al mismo tiempo.
  • Establezca la relación entre el sexo, el amor y el matrimonio.
  • Comparta abiertamente sus valores cristianos su hijo
  • Discuta la importancia de la responsabilidad al escoger y tomar decisiones.

Al desarrollar una comunicación abierta y sincera los padres pueden ayudar a sus hijos a aprender acerca del sexo y su sexualidad de una manera positiva y saludable.

Cuando empezar

Aunque pareciera exagerado educar sexualmente desde el nacimiento sin embargo esta educación debe estar ya en las mentes de los padres. ¿Acaso no hablamos del sexo de nuestros hijos antes de que ellos nazcan y aún también antes de ser concebidos? ¿Porqué no seguiremos haciéndolo cada vez que sea necesario?

Tengamos presente que un niño siempre está en edad de saber lo que pregunta. Según su edad debe ser nuestra respuesta, pero una respuesta debe haber, y esta debe ser verdad.

Los niños tienen distintos niveles de curiosidad y de entendimiento dependiendo de su edad y nivel de maduración. A medida que crecen, los niños frecuentemente preguntarán más detalles acerca del sexo. Un niño de 5 años puede conformarse con la contestación sencilla de que los bebés vienen de una semilla que crece en un sitio especial dentro de la madre. Pero un niño de 11 años quiere saber aún más y los padres pueden ayudar hablándole acerca de cómo un hombre y una mujer se enamoran y planifican vivir juntos, formar un hogar y tener una familia.

Llamemos las cosas por su nombre

Otro aspecto importante es llamar a las cosas por su nombre, los niños pueden tener su propio vocabulario aprendido en la calle, pero es nuestro deber corregirlos y enseñarles con términos que la ciencia médica usa, ¿acaso no lo hacemos con todo los demás miembros y funciones de nuestro cuerpo? ¿Por qué dejaríamos de hacerlo a la mitad del cuerpo humano? Cualquier libro de anatomía nos ayudará al respecto, y cuando no sepamos definir alguna parte o función recurramos a un buen diccionario enciclopédico.

La naturaleza que Dios creó es una gran maestra, siempre que podamos ilustremos con ella y especialmente con ejemplos o pasajes bíblicos donde se muestra la conducta humana en el uso del sexo, tanto para bendición como para desgracia, nada tiene más autoridad que la Palabra de Dios, la cual está impregnada de pureza y verdad.

El adolescente y su sexualidad

Los adolescentes tienen la capacidad para hablar acerca de amoríos y del sexo en términos de sus citas y relaciones amorosas. Ellos pueden necesitar ayuda para lidiar con la intensidad de sus emociones sexuales, su confusión con respecto a su identidad sexual, y su comportamiento sexual en una relación social. Las preocupaciones acerca de la masturbación, la menstruación, las medidas contraceptivas, el embarazo y las enfermedades transmitidas sexualmente son comunes. Algunos adolescentes también batallan con los conflictos acerca de los valores familiares, religiosos o culturales. La comunicación abierta y la información precisa que brinden los padres aumentan las probabilidades de que sus hijos pospongan el sexo para el matrimonio.

Finalmente recordemos que el concepto que nuestros hijos tengan de la sexualidad nunca será más alto que el que nosotros tengamos y le mostremos de ella.

Nuestros hijos perciben más nuestros sentimientos que nuestros conocimientos sobre cualquier tema, cuanto más en este terreno donde existen muchas fuentes de información y nuestro inconsciente juega un papel tan importante.